Conoce a Dewey leemáslibros, el gato que inspiró el título de mi blog


31 de diciembre de 2021

RECAPITULANDO EL 2021. . . y ¡FELIZ AÑO NUEVO!

Libros recomendados 2021


Hace tiempo que no hago este tipo de post recopilatorios de lo leído al finalizar el año, pero hoy me apetece recordar y recomendaros esas lecturas que tanto me han hecho disfrutar, y contaros que en 2021 he leído mucho. 51 novelas han caído, vale que os parecerán pocas si las comparáis con las vuestras, pero, según mi baremo habitual y teniendo en cuenta que en 2020 leí solo 24, pues sí, para mí han sido sorprendentemente muchas, más del doble.

Aunque los números me dan bastante igual, solo son eso, números, un dato que ignoro bastante, no me obsesiona, porque leo lo que leo, lo que puedo y lo que me apetece en cada momento. Además de lectora, soy cinéfila y sobre todo seriéfila empedernida, así que mi tiempo de lecturas se reduce bastante para dar cabida a esos otros hobbies que tan buenos ratos también me hacen pasar.

Lo he disfrutado todo, al menos todo lo terminado y reseñado en este blog, pero también he abandonado mucho, muchísimo, cada vez me cuesta más engancharme, no sé si será la edad, o que llevo mucho leído, o que cada vez me vuelvo más rara. ¿Os pasa también?

Si en algo ha destacado mi buen año lector, ha sido sin duda verificar que he leído al doble de autoras (34) que de autores (17). Pero no es algo que elija con alevosía y premeditación, al menos conscientemente. Y, así como en 2020 mi gran descubrimiento fueron las fascinantes novelas de Joyce Carol Oates, este año me sorprendo también con la cantidad de autoras sudamericanas con prosas y argumentos maravillosos y peculiares que he descubierto, con algunas he incluso repetido y seguiré repitiendo: de hecho de esos 34 lecturas firmadas por mujeres, 9 han sido de autoras latinas: la mexicana Liliana Blum (2), las argentinas Agustina Bazterrica (1) y Samantha Schweblin (1), la colombiana Pilar Quintana (2), la uruguaya Fernanda Trías (2), y la colombiana Sara Jaramillo (1). Un gustazo haberlas conocido (tenéis un gadget a la derecha del blog y abajo, para ellas solas).

No me enrollo más, aunque me ha costado mucho decidirme, a continuación, os pongo mis 15 preferidos, los elegidos, con su enlace a la reseña por si os apetece recordar lo que me pareció en su momento. Por cierto, el orden es aleatorio, nada que ver con que uno me haya gustado más que otro:

29 de diciembre de 2021

Reseña Exprés: “EL CONSENTIMIENTO” de Vanessa Springora

Cubierta de la novela de Vanessa Springora, autobiográfica, acoso sexual, pedófilo escritor francés Gabriel Matzneff
“Aparte de en los artistas, solo hemos visto semejante impunidad en los curas. ¿La literatura lo disculpa todo? Durante mucho tiempo he pensado en esa brecha incomprensible en un marco legal que sin embargo está muy delimitado, y solo se me ocurre una explicación.

Si las relaciones sexuales entre un adulto y un menor de quince años son ilegales, ¿por qué esa tolerancia cuando son obra del representante de una élite, un fotógrafo, un escritor, un cineasta o un pintor? Se supone que el artista pertenece a una casta aparte”.

26 de diciembre de 2021

Reseña Exprés: "ASTILLAS EN LA PIEL" de César Pérez Gellida

Cubierta de la novela de César Pérez Gellida, suspense, historia con solo dos personajes
“No son pocas las ocasiones en las que el destino juega con nosotros ofreciéndonos grandes oportunidades, oportunidades únicas que no son sino caminos que, al recorrerlos, condicionan por completo nuestro porvenir.

Lo cruel es que normalmente ni siquiera llegamos a detectar estos momentos clave, bien porque pasan por delante de nuestros ojos de forma fugaz, bien porque están ocultos detrás de simples detalles que no sabemos distinguir, o bien, como suele suceder, porque no estamos mirando donde tenemos que mirar”.

23 de diciembre de 2021

“EL INSTINTO” de Ashley Audrain

Cubierta de la novela de Ashley Audrain, psicológica, suspense, malas madres, lado negativo de la maternidad
Hubo un día especialmente duro. Se ponía hecha una furia en cuanto me acercaba a ella, daba patadas y manotazos en el aire. Estampó la cabeza contra la pared y luego me miró para ver cómo reaccionaba. Y entonces volvió a hacerlo. No había comido nada en todo el día. Sé que se moría de hambre, pero no consentía llevarse nada a la boca porque era yo quien se lo ofrecía.

Me había pasado llorando todo el rato que estuvo dormida, buscando en internet los primeros signos de trastornos del comportamiento y luego borrando el historial del buscador. No quería que lo vieras, y no quería ser la madre de una niña así