Conoce a Dewey leemáslibros, el gato que inspiró el título de mi blog


9 de diciembre de 2025

Reseña Exprés: “MIL COSAS” de Juan Tallón

Portada del libro de Juan Tallón, editorial Anagrama
"La lista de tareas, flecos, problemas, interrogantes, se yergue ante sí como un muro. Pero no infranqueable, que sí, infranqueable también, sino frágil, capaz de desmoronarse como una montaña de piedras sobre él. Nunca tuvo tantas cosas pendientes de hacer. Piensa solo en los recados fáciles, en que hace muchísimo tiempo que no aspira el coche, que no arregla el timbre de casa, que no escribe una triste columna, que no compra una pila de botón para un reloj, que no se hace con unas tijeras que corten, que no lleva a afilar los cuchillos, que no le busca el botón que le falta a un abrigo, que no abre las cartas del banco, que no lee por primera vez el libro de António Lobo Antunes que se prometió que iba a leer, que no arregla la Roomba, y así todo.

La vida y sus asuntos importantes lo han puesto de rodillas. Se volvió imposible apartarse de ellos para resolver los insignificantes, irrisorios, casi ridículos, que, en cambio, impiden el naufragio diario. Vivir se ha vuelto pesadísimo, agotador, extremadamente intenso, y un ejercicio de velocidad endiablada. La vida lo ha aplastado. Le ha caído encima, desde un noveno piso, como una lavadora."


3 de diciembre de 2025

Reseña Exprés: “EL CIELO ESTÁ VACÍO” de Sara Jaramillo Klinkert

Portada del libro de Sara Jaramillo Klinkert, editorial Lumen
"Tengo veintitrés años y mis ojos centellean como chispas de fuego. Puedo ver en la oscuridad. Mi clan es una manada de lobos, todos aullamos y tenemos los dedos medio y anular igual de largos. Paso horas analizándome frente al espejo, de cerca, muy de cerca hasta que me convierto en un cíclope. Por suerte, la mayoría de las personas andan ocupadas mirando su propio reflejo y por eso no lo notan, excepto alguna que se ha quedado mirando fijamente entre los dos ojos, tratando de adivinar el misterio de mi entrecejo." 

A veces me llegan visiones premonitorias, pero aún estoy aprendiendo a descifrarlas. No sé cómo explicarlo, de repente se enquistan en mi mente y me envían señales que debería poder interpretar, aunque no siempre lo consigo. El viaje a Inglaterra se gestó de esa manera. Simplemente supe que tenía que ir y a partir de ese momento, comencé a planear mi año allá. Sueño con ver nevar. Supongo que de eso se componen los sueños, de cosas que, por alguna razón, no están a tu alcance porque si lo estuvieran no tendría sentido desearlas."


26 de septiembre de 2025

“AMONIACO” de Carlos Augusto Casas


   Pasaje destacado
Portada de la novela La próxima vez que te vea te mato de Paulina Flores, Editorial Anagrama"Hay gente que genera mierda y hay gente que la limpia. Yo pertenezco al segundo grupo. Sin embargo, por un instante de locura, me asomé a lo que significa formar parte del primero. Y me gustó. Me hizo sentir… especial. Mataría por experimentarlo de nuevo. Nunca un verbo estuvo mejor utilizado. Las ganas regresan. El deseo de volver a notar el poder dentro de mí. Ser otra vez una diosa. Maligna. Pero diosa. Quitarle toda aquella felicidad y quedarme con un poquito. ¿O es que no me lo merezco? ¿No nos lo merecemos todos?

A veces hay que salirse del camino que te marcan, ignorar las señales de prohibido, para que el viaje resulte interesante. El mío lleva años siendo demasiado aburrido. La rutina me ha convertido en un ser anodino. En ese momento miro mis manos y me doy cuenta de que lo que estoy fregando es un cuchillo."

18 de agosto de 2025

“LA PRÓXIMA VEZ QUE TE VEA TE MATO” de Paulina Flores


   Pasaje destacado
Portada de la novela La próxima vez que te vea te mato de Paulina Flores, Editorial Anagrama"Pensé que eso era lo más satisfactorio; creer que traspasamos los límites del lenguaje más allá de lo posible, que inventábamos un código nuevo y obsceno a base de «me gustas mucho». Sabía que eran las mismas palabras acarameladas que todas las parejas se dicen, pero al estar culiando con Manuel, tomaban un cariz original y arriesgado.

El juego de mentiras solo ocurría durante el sexo. El santo y seña para volver a la realidad, y ser los dos descreídos del amor romántico de siempre, sucedía cuando Manuel me tomaba del cuello. Mirándome fijo, y haciendo presión para asfixiarme, amenazaba: «La próxima vez que te vea, te mato»."