Pasaje destacado
"Me hechizó nada más verla en el bar X., igual que me atrajo hace veinticuatro años. Probablemente estamos unidos por seudoquímicas que solo vinculan temporalmente, como ella dijo. Sin embargo, es la única mujer con la que he hecho el amor apasionadamente. La echaré terriblemente de menos. Caen las cenizas de mi cigarrillo. Mis ojos se empañan de lágrimas y oigo la nana de mi abuela:
«De nuevo esta noche tu almohada está bañada en lágrimas. ¿Con quién sueñas? Ven, ven a mí. Me llamo Azami y soy la flor que mece la noche. Llora, llora en mis brazos. Aún queda lejos el alba»."