Conoce a Dewey leemáslibros, el gato que inspiró el título de mi blog


10 de marzo de 2023

“MIRA A ESA CHICA” de Cristina Araújo Gámir

Portada del libro de Cristina Araújo Gámir, autora madrileña afincada en Fráncfort, Premio Tusquets 2022
   Pasaje destacado
"Mira a esa chica, es la de la violación. Mírala. Comiéndose una pizza tan ancha. Mírala, sentada en un bar, bebiendo un refresco, ¿no te parece que está flirteando con el camarero? Mírala, dicen que tiene un tatuaje en el pecho, no podía escoger otro sitio. Ahora lo lleva tapado. Para que no la llamen, ya sabes, puta. Mírala con la boca pintada de rojo. Ese rojo de furcia. Mírala, joder, mírala. ¿No se la ve muy relajada? Ahí, sonriendo, como si nada.

¿Tú sabes de aquellas fotos? ¿Las que se hizo en un probador? Casi tenía las tetas al aire. Fue solo unos días después. Y estaba partiéndose de la risa. ¿De qué se reía? No debería haberse reído de esa manera tan basta. Porque, en serio, ¿de qué se reía? ¿De qué se reía tanto? No debería reírse. Pero a ella qué más le da."

“Mira a esa chica” es lo primero que leo de Cristina Araújo (Madrid, 1980), tampoco será lo último, ahora lo sé. También es la ópera prima de esta autora madrileña afincada en Fráncfort, que, para mi regocijo asegura querer “escribir cosas que la gente no se atreve a decir que piensa”. Una primera novela publicada que se ha erigido ganadora del Premio Tusquets 2022, un premio que me suele resultar siempre atractivo (curiosamente, los Nóbeles y los Planetas no los suelo leer, no me llaman nada la atención). Os cuento que me animé con esta lectura gracias a mi buen amigo bloguero Juan Carlos, después de leer la reseña en su blog. Yo creo que la mayoría de los que pasáis por aquí ya lo conocéis, pero a los que no, os lo recomiendo encarecidamente, sus reseñas son muy trabajadas y siempre lee literatura de la buena, merece la pena visitarle.

La trama a grandes rasgos sin spoiler

Así comienza la novela, con una chica con la mirada perdida en un banco, Miriam Dougan, una adolescente a la que acaban de violar. De la noche anterior, de la fiesta, Miri, que es como la llaman sus amigos, recuerda poco, únicamente que de repente se encontró siendo arrastrada voluntariamente a un portal y rodeada por cuatro chicos de fuerte complexión. Ella solo había quedado con El Estudiante, su ligue de Tinder con el que llevaba todo el verano chateando e intercambiando fotos subiditas de tono, pero para su sorpresa, el chico se presenta con tres amigos mas. Por no parecer una niñata, por no dar la nota, Miriam se deja llevar, les sigue la corriente sin imaginarse lo que ellos pretenden, lo que ellos tienen en mente hacer con ella. 
Estás sentada en el banco, el bolso apretado contra las costillas con las dos manos, las pupilas desenfocadas, como si te hubiesen intentado robar. Pero no te han robado. Hace frío, lo notas sobre todo en los pies, y si estuvieras en condiciones de pensar, pensarías, por ejemplo, que cuántas horas quedan para el amanecer. Pero no piensas, y lo único que sientes es. Nada. Que te escuece el raspón en la parte blanda de la rodilla. No tenías ninguna herida cuando has salido de casa. Te sorbes los mocos. Llevas como veinte minutos con la mirada perdida en una mancha de la sandalia. Esa mancha, no la recuerdas tampoco. Una salpicadura de barro, o de cubata, o quizá es que has pisado el charco de una meada de camino al portal. O la vomitona de alguien. O puede que sea, tal vez. Semen. Deberías levantarte y echar a andar. Deberías. No logras moverte. Estás llorando, estás cagada de miedo.

En ese banco se la encuentra Tallie McGrath, que avisa por whatsapp a su amiga Paola con la que había quedado, ambas compañeras de clase, que la llevan a urgencias, al hospital. Y a partir de ahí, de ese momento en el banco en el que Miriam todavía no es totalmente consciente de la gravedad de lo ocurrido, su vida ya no será una vida normal, como la de cualquier adolescente, con las típicas preocupaciones de adolescente. Porque además todo está grabado, hay vídeos circulando.

Al principio no quiere denunciar, solo quiere que la dejen tranquila y en paz. Pero la convencen y denuncia y, aunque su nombre nunca sale en las noticias por preservar su identidad, todos saben quién es esa chica, que ahora es la señalada, “la chica violada”. Una chica que ya no puede dormir, que ya no puede comer, que necesita ansiolíticos y antidepresivos para seguir adelante, que debe de tomar pastillas y sufrir revisiones médicas frecuentes para evitar contagiarse del Sida y de otras enfermedades de transmisión sexual. Un verdadero infierno. . .
Así que ataques de ansiedad, insomnio, ronchas por todo el cuerpo y un principio de úlcera que los médicos trataron con antibióticos; y otra vez venga a vomitar, venga a dejarse comida en el plato, nuevos botes de pastillas multiplicándose en el armarito del baño, sudores, llantos con hipo, agorafobia, un incremento significativo de las visitas a la psicóloga.

Y hasta ahí os puedo contar. . .

Los puntos fuertes de la novela

Los personajes: la estrella es Miriam, por supuesto, la víctima, maravillosa y fielmente retratada. Su madre, Pattie Dougan, no se entera de nada, aunque lo intenta con todo su empeño de madre superpreocupada. Sientes pena por ella, porque la ves sufrir y desear ayudar a su hija, poder arroparla y meterla en una burbuja de cristal a salvo de todo y de todos, pero que no sabe cómo hacerlo.
A ti te pasa algo. Y en efecto, le pasa. Le pasa que le duele todo y no le entra nada. Como una de esas gripes violentas que te dejan con el cuerpo hecho trizas. Solo que esta enfermedad es distinta. No la apaciguan las siestas ni el correr de los días, y la modorra se alterna con trances de una lucidez afilada, como si percibiese los estímulos en carne viva, como si toda su epidermis fuese una llaga.

De entre sus compañeros, están por un lado los que huyen despavoridos y por otro los que eran mas lejanos, pero que ahora inexplicablemente se le acercan. Lo cierto es que los que mas le importaban a Miriam, se alejan: Vix, es (¿era?) su amiga del alma que tampoco sabe como ayudarla y Lukas, su vecino y confidente que le da de lado y no quiere saber nada de ella tras el incidente, en parte por no querer verse involucrado en la vida de esa chica de la que todos hablan, en parte por no saber qué decirle, como dirigirse a ella después de lo ocurrido, el camino fácil, vaya. Una auténtica decepción. Y Jordan, el chico que le gustaba al que también creía su amigo, su amor platónico que ahora no se atreve a hablar con ella ni a llamarla.

Y en contra de lo esperado, esas chicas que antes le hacían burla constante, se metían con ella, con su físico y no le daban tregua llamándole “la Bufi”, “la Zampa”, ahora son las que siente mas cercanas, las que mas empatía le demuestran, las que mas intentan protegerla. Paola, Tallie, Clara. . . ¿por pena, por lástima?

La prosa de la autora es de las buenas, de calidad, y su forma de contarnos la historia es peculiar, a dos voces:
 
Por un lado, una voz que lo sabe todo de Miriam se dirige a ella directamente en segunda persona y en pasado, y le recuerda como eran las cosas “antes de”, metiéndose en su cabeza, en su mente. Recuerda con ella ese bullying sufrido en el colegio, por estar gorda, por no tener un cuerpo escultural, el rechazo, el sentirse invisible, constantemente una apestada. 
Desde pequeña ha sido siempre lo mismo. Cuando una de las chicas de tu colegio quería fastidiar a otra o incordiarla en un clima de complicidad, se plantaba en mitad del patio y gritaba: eres más pringada que Miriam Dougan. También se divertían picándose unas a otras durante las clases: estás sentada al lado de Miriam, tienes la peste. Luego los comentarios se fueron diluyendo, evolucionaron en risitas, en cuchicheos, o en miradas. Pero al menos las chicas ofendían de esa forma difusa, como si todavía se preocupasen de conservar los modales. Nunca, o apenas, hacían referencia a la gordura tal cual. A veces te invitaban a sus fiestas de cumpleaños. Al fin y al cabo, habíais hecho juntas la comunión, vuestras madres se conocían de pedir la vez en la carnicería. Te prestaban sus juguetes y luego te los quitaban.

Por otro lado, otra voz, otro narrador en tercera persona nos hace partícipes de los pensamientos y comportamientos de todos los que la rodean, mostrándonos los mensajes que intercambian los agresores y nos cuenta como lo ven ellos, como se sienten ellos. La mayoría cree que Miriam se lo está inventando todo.
Sinceramente..., yo creo que lo que te pasó fue un malentendido, pero no una violación. Miri, es que esos tíos no te cogieron ni te amenazaron con una navaja. Tú entraste con ellos a ese portal, no les dijiste que te dejasen en paz... Ni siquiera intentaste marcharte... Joder, es que... ni siquiera te sacaste sus pollas de la boca.

Cristina Araújo es sin duda una autora valiente porque se atreve a escribir sobre algo que puede conllevar múltiples riesgos si no se trata adecuadamente. Riesgos que ella asume y de los que, desde mi punto de vista, sale bien parada. Típicos tópicos en los que podría haber incurrido, pero en los que no incurre, como el haber llevado un tema tan delicado y comprometido a los extremos o haberse ceñido a un único punto de vista, el de la víctima o el de los agresores. Pero no, la historia la aborda desde todos los puntos de vista posibles y se plantean todos los pensamientos posibles: los de los compañeros de Miriam, los adultos, los padres, los profesores, los médicos, el abogado que lleva el caso. Los que se ponen de parte de los agresores, ¡pobres chicos!, también opinan culpando a Miriam, porque seguro que ella se lo buscó, porque a ella le gustaba estar en compañía de varones y su carácter era demasiado afectuoso.
Es una desgracia, declara la dueña de un comercio del barrio. Esos chicos van a vivir estigmatizados para siempre. Esos chicos tenían un futuro, lamentan sus conocidos. ¿Cómo pueden haberse visto involucrados en un acto así?.

La novela es cruda, a veces descarnada, no es para menos ya que retrata a la víctima de una manada, de una violación grupal. ¿Os suena? Mi lectura, curiosamente ha coincidido con la triste noticia de estos últimos días, de la chiquilla de once años violada en un centro comercial de Badalona por unos cuantos adolescentes, la mayoría menores de edad a los que ni siquiera se les puede imputar. ¡Que triste que pasen estas cosas!! 

Llama la atención la gran capacidad que tiene la autora para empatizar con los sentimientos, con los pensamientos de una víctima de violación, te hace preguntarte si ella misma habrá pasado por ello, aunque imagino que no, parece que no. Es increíble cómo consigue meterse y meterte en la piel de Miri, quieras o no quieras, sin que te puedas plantear siquiera no hacerlo. No te permite verlo desde la barrera, como si eso no fuera contigo, impasible. Imposible. . ., te tienes que mojar, te pones de su parte sí o sí. 

Algo habitual en las víctimas de violaciones, es que encima de haber pasado por lo que han pasado, se sienten culpables, piensan que ellas incitaron con palabras que dijeron, por como iban vestidas, por algún comportamiento. E incluso piensan que igual no ha sido para tanto, que igual están exagerando.
Ni siquiera..., fíjate, de repente ni siquiera está segura de que la agredieran. Seguramente no tenían intención de cometer ningún crimen, y quizá lo que denunció en realidad no era tal cosa. Porque si ella hubiese dicho: ya basta, fin, se acabó, hasta aquí hemos llegado. Entonces esos chicos la hubieran dejado en paz, no se habrían convertido en violadores. Pero no dijo nada. Mandó una foto de sus tetas por WhatsApp, y ahora con qué derecho se retractaba y les jodía la vida.

Y sienten culpa por no haber sido capaces de resistirse, de hacerles frente a los agresores, por puro y totalmente comprensible miedo a sufrir aún peores consecuencias en su integridad física. Por quedarse paralizadas de puro terror, " inmovilidad tónica" lo llaman los expertos, algo que sucede en un 70% de los casos. ESO NO ES CONSENTIMIENTO, que se entere de una vez todo el mundo. Me parece acertado incidir en ello. 
Con ellos me fui voluntariamente, no percibí nada raro en un principio..., y cuando entramos en el portal... No sé, no pedí auxilio porque no me imaginaba lo que iba a pasar. Y no creí... No creí que viniera a cuento. No, no me sujetaron con fuerza y tampoco me taparon la boca. Es que no... no lo sé... No recuerdo quiénes me penetraron ni cuántas veces. No, yo nunca había tenido relaciones en grupo. No había hecho ese tipo de cosas en mi vida. No, tampoco lo sugerí. Sí, claro que tuve miedo, empecé a ponerme nerviosa... pero no me planteé escapar. No sé por qué... Eran muchos, y yo... Solo me quedé en blanco..., y me dejé llevar. No, en ningún momento intenté luchar. Yo solo quería que terminaran cuanto antes.


Resumiendo: 
"Mira a esa chica" me ha parecido una buena novela, muy bien escrita, con una trama necesaria en la que Cristina Araújo se atreve a poner sobre la mesa sin pelos en la lengua, lo que puede sucederle y probablemente le suceda a una adolescente tras sufrir una violación grupal, todo lo que se le podría venir encima “después de”, un retrato del drama después del drama.

En ciertas etapas de la vida, y sobre todo en lo que concierne al amor, lo razonable es estar trastornado, y la sensatez, una patología.

¿Os recomiendo leer esta novela? por supuesto, sin lugar a dudas, porque Cristina Araújo escribe de maravilla, porque si todo el mundo leyera este tipo de obras, seguro que aumentaba la empatía y el ponerse en el lugar de las víctimas de este tipo de barbaridades. Una lectura necesaria y una autora a la que seguir muy de cerca a partir de ahora

Mi nota esta vez es la máxima, para variar, dicho sea irónicamente:




32 comments:

  1. Me parece una novela diferente y tiene pinta de ser durilla. Me la apunto por si puedo hacerle un hueco en la lista de los pendientes.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Durilla es, sí, porque el tema es duro, no podría ser de otra manera, pero es original por cómo está tratado
      Un saludo

      Eliminar
  2. Historia dura de una violación. Como ya viste, tiene que ver con la película que reseñé esta semana en el blog. La verdad, es un tema que me da una rabia... cuando escucho, veo, leo cosas parecidas a lo de la "manada" me entran los mil demonios, qué asco, qué falta de educación y de valores. Como lectura, no sé yo si me encajaría.

    Feliz finde ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola!
      sí, un asco que ocurran estas cosas y se destrocen de esta manera la vida de tantas chiquillas
      A mi también me da mucha rabia, además de asco.
      Es una buena lectura, otra cosa es que el tema no te apetezca
      Feliz finde para ti también

      Eliminar
  3. ¡Hola, Marian! Este libro toca un tema duro y sensible, que estoy segura llegará a conmoverme. Y es que, muchas veces la sociedad se empeña en juzgar de una manera tan injusta a las victimas de violación, que les es imposible recuperarse. No he leído nada de la autora, así que me la apunto. Muchas gracias por la reseña y espero tengas un lindo fin de semana. ¡Besos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Marita!!
      es un tema muy duro, sí y seguro que te conmoverá, haces bien en llevarla apuntada y tenerla en cuenta si la novela te atrae
      Son cosas que nnca comprenderé, porque la sociedad a veces es tan injusta con las víctimas encima de que han tenido que pasar por lo que han pasado.
      ¡Besos!

      Eliminar
  4. Tema duro y por desgracia, tan real. Ese empeño en convertir a las víctimas en culpables y a los culpables en víctimas...
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cierto, Margari... Real como que es algo que vemos y escuchamos cada día
      Besotes!

      Eliminar
  5. ¡Hola, Marian!
    Me asombra y a la vez me alegra ver como, de un tiempo para acá, tantas óperas primas son tomadas en cuenta por su extraordinaria calidad, recibiendo merecidos reconocimientos.
    Hecho que años atrás no solía suceder con mucha frecuencia, sin duda todo un logro para estos autores emergentes.
    En cuanto al tema de la novela, lamentablemente sí que estamos hablando de algo duro y difícil de digerir. La violación es un tema en el que juegan abrumadoramente las emociones y en tomo al cual abundan los prejuicios y los equívocos. Concuerdo contigo y aplaudo tu mención acerca de la "inmovilidad tónica", es justo resaltar, como tú lo has hecho y en letras mayúsculas para que se entienda de una vez por todas, que "ESO NO ES CONSENTIMIENTO".
    Debe quedar claro que en muchos casos las víctimas no se defienden por experimentar una reacción como esta, y no porque están de acuerdo con lo que está sucediendo.
    Pueda que no sea una lectura para todo público debido al tema tratado, por ahora tomo nota, sé que cada libro tiene su momento y creo que este no es mi momento, pero no descarto leerlo a futuro.
    Totalmente de acuerdo contigo, "una lectura necesaria y una autora a la que seguir muy de cerca a partir de ahora".
    Un gran abrazo y feliz fin de semana ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Mi querida Mariana!!
      es cierto y no deja de asombrarme la cantidad de obras que se publican y que son primeras novelas de autores que además son muy buenas y que parecen difíciles de superar en las próximas que llegarán, ya veremos... Por eso habrá que seguir de cerca a esta autora para ver si sigue en la linea de calidad. Además, eso que ella misma dice de que quiere escribir sobre “cosas que la gente no se atreve a decir que piensa”, pues tú que me conoces, sabes que me resulta intrigante y atractivo, que augura buenas lecturas.
      Quería resaltarlo, sí, lo del consentimiento, algo que últimamente tenemos por aquí muy de actualidad por desgracia y que no todo el mundo parece tenerlo claro.
      No es una lectura fácil, no, así que haces bien en dejarla para mas adelante, si crees que ahora no es el momento
      Un beso enorme y feliz finde para ti también

      Eliminar
  6. ¡Hola!
    Qué tema tan duro y, por desgracia, actual. No debe ser una historia fácil de leer; pero parece diferente, interesante y, como tu dices, necesaria. No descarto leerla más adelante.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Lorena! haces bien en tenerla en cuenta, sé que tú no eres de las que descarta de buenas a primeras lecturas por ser duras, así que anímate en un futuro o cuando sientas que es el momento
      Un abrazo para ti también

      Eliminar
  7. Hola, Marian:
    Agradezco mucho la mención que haces a mi blog, que sé que es sincera.
    Me satisface mucho mucho que la novela de Cristina Araújo te haya gustado. La verdad es que está muy bien. No sólo por lo que cuenta -desgraciadamente más habitual de lo que debiera de ser- sino sobre todo por cómo lo cuenta. Impresionante esa manera de narrar construyendo un puzle que avanza acorde con la mente de la víctima que intenta colocar las piezas en su debido orden.
    La novela es dura, sí, pero sobre todo es muy real, muy auténtica.
    Un beso grande, Marian

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Juan Carlos!
      por supuesto que es sincera, sabes que yo soy muy sincera siempre, lo soy en la vida en general y por supuesto aquí en mi blog. Y pienso que tienes un blog de mucha calidad (se nota que eres profe de literatura), me encanta haber sacado esta lectura y haberla descubierto en el tuyo y gracias a ti.
      Lo del puzzle..., es una pasada como lo hace la autora y como retrata a la perfección la mente de una víctima que ha sufrido tal brutal agresión
      Un beso enorme, Juan Carlos

      Eliminar
  8. Esta novela está ya en mi lista de pendientes. Leí una reseña, no recuerdo dónde, que me la hizo muy apetecible. También el premio Tusquets me suele atraer. Tras leer esta reseña tuya, la adelanto en mi lista.
    Siempre he pensado en esos jueces que declaraban inocentes a los agresores porque la víctima no se había resistido; siempre he pensado que yo no me resistiría porque ya que te violan, al menos, que no te peguen una paliza. En fin, que esa ley del Sólo sí es sí, aunque esté teniendo resultados no esperados ni deseados y requiera una modificación, es muy necesaria.
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De acuerdo contigo Rosa, ley muy muy necesaria por mucho que no sea perfecta, y no sea lo esperado, pero mejor que nada..
      Supongo que la verías en el blog de Juan Carlos, la novela, como yo, me alegra que la adelantes, merece la pena, mucho
      ¿Sabes? yo también siempre he pensado, sobre todo cuando era adolescente y joven que, si intentaran violarme me dejaría, no me resistiría, para que acabara cuanto antes y no me hicieran mas daño aún, es una reacción normal y probablemente la mas sensata
      A ver que te parece a ti
      Un beso

      Eliminar
  9. Qué duro debe de ser leer esta novela. Ha sido ya algo duro leer tu reseña (me ha gustado mucho, por cierto). No puedo decir que me apunto este título porque ya lo tenía fichado, pero sí que me lo has hecho aún más apetecible. Triste e indignantemente, aunque se trate de una obra de ficción, esta novela narra una historia muy real. Comparto, sin haberla leído, tu opinión de que este tipo de lecturas son necesarias, en este caso para empatizar con la víctima y que muchos entiendan que es eso, una víctima. Además, al ser una novela tan poliédrica, creo que puede ofrecer una buen retrato de una sociedad que da cabida a que pasen este tipo de barbaridades.
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí Lorena, tienes toda la razón en lo que dices y te digo como a Rosa, supongo que leerías la reseña de Juan Carlos y la ficharías, como hice yo, porque es muy apetecible por muy dura que sea, que lo es. Además la forma de narrar de la autora es peculiar, yo creo que tiene mucho futuro por delante
      Espero que te guste tanto como a mi.
      Besos

      Eliminar
  10. Gran reseña querida Marian y abordándola desde todos los puntos de vistas posibles. Me parece muy bien que la autora se meta fondo con esto que está sucediendo y que no sé si es por la mucha información que tenemos ahora, pero parece que estamos volviendo a una sociedad asalvajada y que trata a la mujer otra vez como un puro objeto. La paralización ante una violencia o mejor dicho ante una violación es casi lo normal en una posible víctima y jamás debería pesar como un posible atenuante para el presunto agresor. Y luego está lo del tema del futbolista que violó a una chica en una discoteca que es que ya saca los colores de una sociedad que a veces parece podrida. Me gustaría leer esta novela y probablemente para la feria del libro sea una de las que tengan el punto de mira.
    Besos, Marian.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Querido Miguel!!
      me gusta saber que opinan los hombres sobre este tipo de atrocidades que por desgracia conocemos con frecuencia últimamente en las noticias, que se les hacen a las mujeres y a las niñas, las violaciones grupales y las violaciones en general, una pena.
      Lo del futbolista..., pues igual de atroz que la violación de la chiquilla de once años en el centro comercial, el problema e sube luego no se hace verdadera justicia, para mi gusto, no se paga lo que se tendría que pagar.
      Me alegra que tomes en cuenta la novela, siempre me sorprende cuando me comentas darme cuenta de que ademas de ver y comentar películas, también lees, me encanta
      Besos y gracias por tus comentarios siempre tan amables y generosos

      Eliminar
  11. Hola Marian, esta me la llevo apuntadísima. Por un parte, me interesa la trama, algo que no debería ocurrir y, sin embargo, ahí vamos. Es que, además, la sinopsis me ha dejado muy tocada. No me importa que sea descarnada. Por otra parte, porque me pasa como a ti, me gustan estos premios. En realidad, me gusta todo lo que publica Tusquets. Una reseña estupenda. Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Marisa!
      es descarnada, sí, tiene tramos duros de asimilar, pero merece la pena. También me suele atraer todo lo que publica Tusquets, sea premiado o no, pero en cualquier caso los Tusquets siempre me resultan mucho mas atractivos que los Planeta por ejemplo, que la mayoría de las veces ni me planteo leer.
      ¡Gracias!!
      Besos

      Eliminar
  12. ¡Hola, Marian!

    Puff, ha sido leer la sinopsis y que diferentes casos de agresiones me vinieran a la cabeza. Por desgracia esta novela representa nuestra triste realidad y me enfada y da rabia que no se busque una solución.

    Es una novela que me atrae mucho, pero me la reservo para el futuro, porque últimamente este tema me cabrea mucho. Aun así me ha encantado tu reseña, como siempre.

    ¡Un beso!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Laura!
      a mi también me cabrea el tema y que no se le de solución definitiva y eficaz, pero me gusta leer sobre ello, sobre todo si es una buena novela. No la pierdas de vista para el futuro, que esta es delas tuyas
      ¡Un beso!

      Eliminar
  13. El tema es terrible. A mí me produce salpullido solo de pensarlo. aunque tu reseña es buenísima y muy completa, como siempre, no me voy a animar a leerla. Prefiero cosas más ligeras, que no me impidan dormir, como Pérez-Reverte. Y dentro de poco, voy a redescubrir los libros de Salgari, a ver si son tan buenos como los recuerdos de mi niñez
    Besazos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Sorokin!
      a mi la verdad es que leer libros duros no me quita el sueño, jeje, tengo claro que es ficción y no me afecta y los libros ligeros me suelen aburrir. A Pérez Reverte le leía hace mucho, no me desagradaba pero ahora no consigo que me apetezca. Los de Emilio Salgari me recuerda a mi madre, ella me propuso leerlos, creo que los leí todos, me encantaba. Pero ahora..., como que tampoco, jeje
      Besazos

      Eliminar
  14. ¡Hola! Me la apunto ya mismo. La historia suena terrorífica y se pone peor cuando me doy cuenta que esto no es tan lejano a la realidad. Me gusta en especial porque ataca ese tema desde diferentes ángulos. Gracias por la reseña.
    Besoss ♡

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, para nada lejano a la realidad que escuchamos a diario, muy triste e incomprensible. Ya me contarás si la lees
      Besos

      Eliminar
  15. Hola, Marian.
    Me ves venir, lo sé. Pero no te creas, que con otras reseñas he tenido mis dudas y la llegué a apuntar. Lo que pasa es que este tema tan lamentablemente habitual y más en estas últimas semanas en Cataluña, para novelas puede conmigo. No es que no haya leído nunca novelas así, algunas han caído pero ahora no tengo ánimo para esto y me sobra con la actualidad. El problema es que lo que se está haciendo se está haciendo mal, empezando con la educación de los chavales, ya lo hemos hablado y es algo que afecta a todos los temas.
    No me quiero imaginar lo que tiene que ser vivir algo así, me parece bien que la autora lo exponga y se exprese sin tapujos. Un aplauso para ella.
    Besines

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí Norah, te veía venir..., sé que estos temas te saturan y lo entiendo porque por desgracia los escuchamos cada día en los informativos de radio y televisión. Sé que prefieres otros temas para tus lecturas.
      Vivir algo así, debe de ser como para romperte la vida para siempre.
      Sí, yo también aplaudo a la autora por haber puesto sobre la mesa el tema de una manera tan real y descarnada, porque ese tema es real y descarnado.
      Besines

      Eliminar
  16. Mira que me suelen gustar estas novelas que tratan temas duros, pero en esta ocasión, creo que es demasiado para mí. Me alegro de que te haya gustado y sé que es una historia necesaria, pero no me veo leyéndolo en este momento.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bueno, cada uno debe elegir el mejor momento para cada lectura.
      ¡Gracias por pasarte!
      Besos

      Eliminar