Los desastres naturales han acabado con Norteamérica. En su lugar, tras una cruenta guerra por acaparar los pocos recursos que quedaron, ha resurgido un nuevo País, Panem, compuesto por 13 Distritos y una ciudad, El Capitolio. Aquí reside el tirano Gobierno de la nación y los ricos, los afortunados…
Como los habitantes de los Distritos no estaban por la labor de acatar las nuevas normas y además pasaban mucha hambre, tuvo lugar “la Revolución”, días oscuros para todos.
Lógicamente ganaron los fuertes y el distrito 13 fue aniquilado. Murió mucha gente y como tamaña rebeldía no podía quedar impune, se creó el "Tratado de la Traición" con nuevas leyes para garantizar la paz. Además, como recordatorio, se idearon los anuales “Juegos del hambre” o “La cosecha”.
Sus reglas consisten en que cada distrito debe entregar dos tributos, un chico y una chica entre los 12 y los 18 años para su intervención en dichos juegos. A los veinticuatro, se les encierra en un estadio al aire libre, que puede simular cualquier ecosistema, desde el desierto abrasador del Sáhara, hasta el mismísimo Polo Norte.
Dentro, tendrán que luchar entre ellos a muerte y sólo habrá un ganador.
Pero el colmo de tal tortura, es que El Capitolio ha convertido este evento en una festividad, un gran acontecimiento deportivo televisado en directo, ávido de audiencia, como si de una mezcla macabra entre “Gran Hermano” y “Supervivientes” se tratara.
Nuestra valiente y rebelde Katniss Everdeen (16 años), conocida más tarde como "La chica en llamas", vive en el Distrito 12, uno de los más pobres, dedicado casi exclusivamente a la minería, a la extracción del carbón.
De su padre ha heredado la habilidad para usar el arco y las flechas para cazar. Desde su muerte, en una explosión en las minas, ella es la encargada de sacar a su familia adelante, arriesgando su propia vida al adentrarse clandestinamente en el bosque, junto a su apuesto amigo Gale. Ambos comparten peligros, riesgos y ¿atracción mutua?
El día más triste del año, ya ha llegado. De las urnas saldrán los nombres de los dos desafortunados que se enfrentarán a todo tipo de calamidades y a una muerte casi segura.
Katniss casi se desmaya en la ceremonia, al escuchar por los altavoces el de su hermana pequeña Prim. Sin pensárselo dos veces, sube al podio ante el silencio desaprobador de todos los presentes, ofreciéndose voluntaria, algo insólito en la historia de los juegos.
El otro chico elegido es Peeta Mellark el "El chico del pan", enamorado de ella desde que tiene uso de razón. Entre ellos hace tiempo que hay una gran complicidad, una conexión especial solo con miradas, desde que, a escondidas de su madre, la panadera del distrito, les consiguió dos panes medio quemados, hecho que probablemente las salvó ese día de morir de hambre.
“Ella siente que le debe algo y que debió darle las gracias. Pero ahora ¿cómo podrá hacerlo si tendrán que matarse entre ellos?
Es la hora. Ya no hay vuelta atrás. Los juegos van a comenzar. Los tributos deben salir a la Arena y… luchar por sobrevivir.
-- ¡Que empiecen los septuagésimo cuartos Juegos del Hambre!”
Ahora sí que empieza la verdadera pesadilla...
¿Conseguirá Katniss sobrevivir y regresar al Distrito 12 para reencontrarse con su madre, Prim y Gale? ¿Tendrá que matar a Peeta?