“Cuentan que una vez, al pie de los Pirineos, alguien tuvo la estúpida idea de plantar jazmines en un jardín iluminado por lucecitas navideñas para que una novia perdida fuese capaz de encontrar de nuevo el camino, marcado en el cielo, de Nunca Jamás.
Cuentan que fue entonces cuando aprendió a volar, por fin, para poner remedio a la soledad de un hombre, de ojos grises y manos impacientes, que tantas veces antes había dibujado, en las arenas blancas de un arroyo, las líneas de todos los veranos del mundo”
Cuentan que fue entonces cuando aprendió a volar, por fin, para poner remedio a la soledad de un hombre, de ojos grises y manos impacientes, que tantas veces antes había dibujado, en las arenas blancas de un arroyo, las líneas de todos los veranos del mundo”
Un lugar sin sorpresas, hasta que Helena tropieza con Marc, un buen amigo al que había perdido de vista durante muchos años, y la vida en el pueblo deja de ser tranquila. Quizás sea el momento de refugiarse en la nueva librería con un té y galletas, o acostumbrarse a los excéntricos alumnos de su madre y a las terribles ausencias. Quizá sea tiempo de respuestas, de cambios y vendimia. Tiempo de dejar atrás todo lastre y aprender al fin a salir volando."
Debutó con "Cuéntame una noctalia" en Amazon. "Un hotel en ninguna parte" es su segunda novela. Las buenas críticas y ventas de este, mantuvieron a la autora durante medio año en el Top20 de los más vendidos de Amazon.
En noviembre de 2015 editó y publicó un libro de relatos, junto con otros autores, titulado "La librería a la vuelta de la esquina". En 2016 publicó "El noviembre de Kate" y en 2017, una novela feelgood sobre el amor a los libros, a las librerías y a los libreros: "La librería del señor Livingstone". En verano de 2018, publicó su última obra "Todos los veranos del mundo".
De su obra había oído muchas cosas, la verdad es que todas buenas. Pero lo que más se repite en las opiniones de los blogueros que suelo leer y visitar es sobre todo el buen rollo y optimismo que transmiten, remansos de paz, lecturas amables escritas para hacerte sentir bien, totalmente representativas del género “feel good” (aquí puedes leer más sobre esta nueva corriente literaria).Y yo, después de haber leído “Todos los veranos del mundo”, no puedo más que corroborarlo todo.
¿De qué va la novela?
En la historia que nos cuenta Mónica, la protagonista es Helena, una abogada que está a punto de casarse con Jofre en Serralles, el pueblo donde siempre veraneaba y que hace tiempo no visita. Allí está su familia (su hermano mayor Xavier, su hermana pequeña Silvia, su madre y el recuerdo de su padre fallecido) esperándola con los brazos abiertos y con muchas ganas de volver a verla. Y Marc, su antaño compañero de tantas aventuras veraniegas, su querido y antiguo Peter Pan al que perdió de vista mucho tiempo atrás.
Fue tan íntimo el espacio que nos envolvía durante todos aquellos meses compartidos que nos ha quedado un rastro de pertenencia mutua. Su voz, sus gestos, todo me resulta extrañamente mío.Allí todo sigue igual que siempre, los mismos vecinos, las mismas casas, las mismas tiendas. Bueno, en realidad exactamente igual no. Para el regocijo de Helena, alguien ha abierto una nueva librería, la pequeña y acogedora “ Biblioteca voladora”. Su propietario es Jhonathan Strenge, un agradable librero con cara de ratón que también supone un gran descubrimiento para ella, por brindarle su amistad y alguna que otra tarde de charla sobre libros, escritores y té.
Quiero dejar de ser tantas cosas a la vez para convertirme solo en una: una mujer con un libro abierto entre las manos, solo eso, ¡es lo que quiero!La cercanía y el amor de su familia, los recuerdos de su infancia y adolescencia que la sobrevuelan constantemente, su reencuentro con Marc Saugrés (un soñador que se ha pasado la vida añorando volver a ver a su Wendy), y unos pocos días rodeada de naturaleza, le harán replantarse muchas cosas de su pasado, pero sobre todo de su presente, de la relación con su madre y hermanos, del amor hacia su prometido (una persona bastante fría, con todo muy pensado, medido, y calculado) y de lo que realmente siente Jofre por ella.
Su mundo, un mundo que creía tener bien hilvanado, bien delimitado, se vuelve de pronto patas arriba, se revoluciona y llega un momento en el que ya no sabe ni que pensar de lo que le está ocurriendo tras su regreso a Serralles.
Pensé que no quería volver a Serralles porque los recuerdos me pesarían tanto en los bolsillos que no podría echar a volar con los primeros soplos de la tramontana. Y sin embargo —sin embargo— allí estaba, más despierta que en mucho tiempo, lidiando con algunas verdades, desvelando las trampas de mi memoria”
¿Qué me ha parecido? ¿Me ha gustado?
Mucho. Me lo esperaba, me esperaba que me gustase, aunque para ser sincera no esperaba que me gustara tanto la forma de escribir de esta autora. Me ha sorprendido muy gratamente y me ha encantado sumergirme en su prosa, una prosa que no siendo demasiado rebuscada, me ha parecido agradable, bonita, y muy cuidada, de esa que es un gusto leer.
Los personajes no son superficiales, están bien descritos, con sus caracteres bien perfilados para que entendamos el tipo de relación que tienen con Helena y curiosamente he sentido que empatizaba con el librero de “la biblioteca voladora”, un tipo algo extraño y solitario al que no he podido evitar cogerle cariño, llegando incluso a imaginarme tomando el té con él y charlando sobre Murakami o cualquiera de mis escritores preferidos una tarde cualquiera de verano.
Resumiendo: en “Todos los veranos del mundo" me he encontrado con una historia tierna, romántica pero no en exceso, para nada empalagosa, con un trasfondo y un mensaje muy positivo, que te transmite eso, positividad, bienestar, ese tipo de argumentos que cuando cierras el libro te dejan un buen sabor de boca que te dura un tiempo. Una historia que consigue lo que en definitiva buscamos todos los lectores cuando leemos: soñar despiertos, vivir otras vidas, viajar sin movernos del sillón, y volar… como nuestra Wendy que al final ha aprendido a volar.
Además, Mónica ha conseguido con mucha facilidad transportarme a los veranos de mi infancia, de mi adolescencia en el pueblo con mis padres mi hermano y mis amigos. Mi pueblo, ese pueblo al que hace tiempo decidí no regresar, porque allí las ausencias duelen más y todo huele a eso, a ausencias, a una vida pasada maravillosa que me gustó vivir, pero que me duele recrear.
Aunque al fin y al cabo, como bien dice una frase del libro:
Además, Mónica ha conseguido con mucha facilidad transportarme a los veranos de mi infancia, de mi adolescencia en el pueblo con mis padres mi hermano y mis amigos. Mi pueblo, ese pueblo al que hace tiempo decidí no regresar, porque allí las ausencias duelen más y todo huele a eso, a ausencias, a una vida pasada maravillosa que me gustó vivir, pero que me duele recrear.
Aunque al fin y al cabo, como bien dice una frase del libro:
“No importa lo lejos que corras a esconderte, la vida acaba por encontrarte.”
¿Lo recomiendo? Por supuesto, mucho, muchísimo, he disfrutado con esta lectura amable, agradable y al acabarlo he entendido a la perfección porque se encuadra dentro de ese género "feel good” que está ahora tan de moda, y del que tanto se habla.
Mi puntuación no puede ser otra que la máxima:
Coincido contigo 100%. Los libros de Mónica tienen algo diferente de los del género y hace que a mí me gusten mucho. Sobre todo en este caso me quedo con el poder de trasladarte a los veranos de la infancia y también me gustó el librero y un poco más, el hermano.
ResponderEliminarBesos
Es cierto, tienen algo distinto que te hace sentir bien mientras lees. Bueno, los personajes de los dos hermanos también me gustaron mucho, incluso Silvia la bióloga marina obsesionada con la defensa del medio ambiente y que dice siempre lo que piensa
EliminarBesos
Totalmente de acuerdo. Los libros de Mónica se disfrutan de una forma especial. Se leen con la sonrisa en la cara y con una sensación de paz y tranquilidad...
ResponderEliminarBesotes!!!
Sí..., exacto, con una sonrisa en la cara y pensando todo el rato: "tengo que leer más de esta autora, ¿cómo puede ser que no la haya descubierto antes?"
EliminarBesotes Margari!!!
¡Hola! Pues la verdad es que no me termina de llamar la atención, aunque la portada es preciosa. Muchas gracias por la reseña! Besos.
ResponderEliminarSí, la cubierta es muy bonita, pero la novela es aún más bonita por dentro. Es una pena que no le des una oportunidad
EliminarBesos
Yo tengo ganas de leer los libros de esta autora, porque en las opiniones que leo habláis muy bien.
ResponderEliminarUn abrazo
¡Hola! Eso me pasaba a mí, que con tanta reseña positiva tenía unas ganas...
EliminarBesos
La forma de escribir de Mónica es atrayente, sin desmerecer la propia historia, pero escribe de una manera tan bonita...jejeje.
ResponderEliminarBesitos cielo.
¡Hola guapa! Sí es cierto, me encanta su prosa, bonita y cuidada
EliminarBesos
Pues conozco a la autora de nombre al igual que su blog, pero aún no me he acercado ni a la una ni al otro. Sí he leído alguna reseña de sus libros anteriores y la verdad que me inspiran buen rollo. Tal vez tenga que darle una oportunidad ya que dices que escribe tan bonito.
ResponderEliminarBesos
Pues sí Lorena yo te recomendaría que le dieses una oportunidad. A mí me ha sorprendido mucho. Todo lo que había leído sobre sus novelas y en particular de este libro era bueno, y sabía que me iba a gustar, pero en el fondo no me esperaba algo así. Me esperaba unos personajes superficiales y una manera de escribir no tan cuidada.
EliminarBesos
¡Hola, Marian!
ResponderEliminarTiene que ser un libro precioso, muy acogedor, de esos que te envuelven y te hacen sentir bien durante su lectura. ¡Estos libros me encantan! Me lo apunto sin dudarlo y me he pasado en algunas ocasiones por su blog, ¡pero no sabía que era ella!
¡Un beso y felicidades por la reseña!
¡Hola Laura! Sí, es de esa lecturas que te arropan y te hacen sentir bien
EliminarTambién me pasó como a ti, conocía su blog, de vez en cuando la visitaba, y aunque sabía que era escritora porque lo ves, hasta que no leí este libro no supe que era ella
Besos
¡Ohhhh! Muchísimas gracias por la reseña, Marian. Me ha hecho muchísima ilusión, eres muy amable. Me alegra tanto que hayas estado a gusto entre estas páginas, me gusta en especial cuando me habláis de la nostalgia de vuestros veranos de infancia. Un beso grande.
ResponderEliminar¡Hola Mónica! Me hace mucha ilusión tu comentario. Tu novela me transmitió mucha serenidad y sí..., me transportó a mis maravillosos y felices veranos, donde estábamos todos, no faltaba nadie, veranos muy especiales en el pueblo. Pero lo que he contado, ahora ya no voy por allí, por las ausencias que pesan demasiado y me harían pasarlo mal.
EliminarBesos
¡Hola Marian! Me gusta mucho la reseña y decirte que todo lo que escribe Mónica, me lo leo en plis. Es maravillosa y maravillosas son sus novelas.
ResponderEliminarUn saludo feel-good desde https://yoleonovela.blogspot.com
¡Hola! Bienvenida por aquí. Para mí ha sido genial descubrir a esta autora. Gracias por tu comentario
EliminarBesos
También lo he disfrutado mucho como siempre que leo a esta autora.
ResponderEliminarUn beso
¡Hola!
ResponderEliminarTengo muchas ganas de leer este libro desde que se publicó. Espero poder leerlo pronto.
Un besito.
Hola. Leída la novela y reseñada en mi blog, me encanta como escribe la autora y todo lo que nos transmite.
ResponderEliminarBesos.
Hola Marian
ResponderEliminarNo había leído nada de la autora y me animé con esta novela. Te hace pasar un buen rato y se lee muy bien.
Saludos
Siempre es un placer leer a Mónica, siempre :-)
ResponderEliminarHola preciosa!
ResponderEliminarTodavía no he leído nada de esta autora y mira que dos de sus libros me llaman bastante pero son tantos los pendientes que todavía no he podido hincarle el diente a ninguno de sus libros.
−Fantasy Violet−
Besotes! ♥
hola! sera un placer cuando podamos leerlo y disfrutarlo, felicitaciones a la autora y a a ti por tan bella reseña, gracias! abrazosbuhos
ResponderEliminar¡Hola! ^^
ResponderEliminarJustamente hace poco terminé un libro de Mónica Gutiérrez. De momento solo he leído dos, y han sido muy buenas lecturas, así que seguramente este será el siguiente en caer. Son historias sencillitas, pero me gustan mucho sus libros.
Besos!
Este si que me gustó, me gusta el estilo de Mónica
ResponderEliminarBesos
hola! debo, debo, debo leerlo! gracias solo leo maravillas.
ResponderEliminar