"Uno se acostumbra a vivir solo. Cuando Jean murió, creí que se acababa el mundo. Que yo me volvería invisible, porque él ya no estaba allí para ocultar mis errores y mis defectos; porque ya no estaba allí para protegerme. Pero no sucedió nada de eso; sólo descubrí que había envejecido. Mi vida con Jean me lo había ocultado, porque yo me veía en sus ojos, que seguían siendo los de nuestra juventud. Tampoco yo le veía avanzar por los caminos del tiempo.
Desde que conocí a Albert, siento que me ha devuelto algo que perdí con la muerte de Jean. Es la suavidad relajante y particular que sentimos bajo la mirada de otro. Uno nunca envejece con miradas así, solamente se siente felicidad y una inmensa ternura. Los espejos no importan un ardite cuando se vive desde siempre envuelto en la mirada amorosa de un ser que conocemos con todo nuestro corazón. Y lo que perdemos es brutal cuando nos quedamos solos frente al espejo que durante tanto tiempo habíamos ignorado, y que parece reflejar precisamente ese olvido".
Desde que conocí a Albert, siento que me ha devuelto algo que perdí con la muerte de Jean. Es la suavidad relajante y particular que sentimos bajo la mirada de otro. Uno nunca envejece con miradas así, solamente se siente felicidad y una inmensa ternura. Los espejos no importan un ardite cuando se vive desde siempre envuelto en la mirada amorosa de un ser que conocemos con todo nuestro corazón. Y lo que perdemos es brutal cuando nos quedamos solos frente al espejo que durante tanto tiempo habíamos ignorado, y que parece reflejar precisamente ese olvido".
Pero su nieta Jade, a pesar de ganar un reducido sueldo como periodista free-lance no puede permitirlo, decide echarle valor y llevársela a vivir con ella a París, aún a riesgo de poner en su contra a la familia al completo.
Abuela y nieta creen conocerse, pero la convivencia les revelará que realmente no saben nada la una de la otra. Jade ha escrito un libro pero está muy desanimada al haber sufrido el rechazo por parte de unas cuantas editoriales. Y Mamoune se ofrece a ayudarla. Pero ¿cómo pensaba hacerlo? Jade ignoraba que desde hacía muchísimo tiempo su abuela era una gran lectora, toda una erudita y una amante secreta de los libros, porque en aquellos tiempos estaba mal visto que las mujeres leyeran. “Los libros fueron mis amantes, y con ellos engañé a tu abuelo, que nunca supo nada durante toda nuestra vida en común. Llegué a los libros de golpe, como una intrusa, sin la instrucción que proporcionan la inclinación y la aptitud hacia la lectura. Al abrir sus tapas, elegí lo peor que podía hacer una mujer de mi entorno. Contemplaba un mundo que tenía prohibido, y era perfectamente consciente de que no era el mío. Luego volví a cerrar la puerta, pero ya era imposible olvidar lo que había vislumbrado: un espacio inmenso, sin el cual ya no podía vivir”
Formaban una pareja poco común: la octogenaria que aún no conoce el mar y la treintañera. Juntas compartirán momentos entrañables, su pasión por los libros y los escritores, aprenderán a entender sus mundos tan dispares, intercambiarán conocimientos, sabiduría, en definitiva, se irán descubriendo poco a poco cada día.
¿Qué habría sido de Mamoune si Jade la hubiera abandonado a la triste suerte que la vida le reservaba en una residencia?
Frédérique Deghelt es periodista y escritora, como la protagonista de nuestro libro, y también realizadora de televisión en Francia, su país de origen. En 1995 publicó su primera novela “Mistinguett, la valse renversantey” desde entonces no ha dejado de tener éxito.
Cuenta en total con siete novelas publicadas, alguna de ellas llevada a la gran pantalla “La vie d’une autre” (2007). Por la novela que hoy reseño consiguió el Prix Solidarité en 2010. Actualmente vive en París.
¿Cuantas decisiones importantes tomamos a lo largo de nuestra vida? ¿de cuantas nos arrepentimos?, o todo lo contrario, ¿cuales desearíamos haber tomado y nunca lo hicimos?
Divagaciones aparte, hoy os traigo a mi biblioteca personal esta maravillosa novela cortita (288 páginas), una joyita cargada de sentimientos, y de frases profundas, un libro hermoso que te hará pensar mucho y hacerte más de una pregunta.
Mamoune y Jade, dos generaciones distintas que entrecruzan sus vidas en un momento quizás idóneo para ambas: Jade un alma atormentada que acaba de dejar a su pareja Julien y su abuela, viuda aferrada todavía con uñas y dientes al pasado.
“A veces me pregunto de qué sirven los recuerdos que vuelven, tan intensamente, mientras que los detalles del día anterior se borran de la memoria. Son como el vuelo de las aves migratorias, que no avisan de cuándo piensan regresar, y sólo cuando pasan por encima de uno se divisan sus detalles con emoción. Y al instante siguiente ya no están”.
“Supongo que para mí, al final de mi vida, es una suerte vivir aquí, a pesar de haber abandonado las tierras montañosas que acompañaron mi infancia. Al haber conocido la capital, comprendo el sufrimiento mejor. No es que parezca un lugar pobre, ni que abunden los desheredados, pero la miseria humana y la soledad de las almas destacan más entre la muchedumbre, y yo les presto atención. Además, gracias a Jade habré descubierto un montón de cosas que también van de la mano con la vida de ciudad: la humildad de aprender a cualquier edad, la facultad de rebelarse contra lo indigno y proclamarlo, aunque sea con la voz afónica, en pensamientos que se irán con el viento”.
Una unión providencial entre dos apasionadas lectoras que aprenderán a convivir y compartirán secretos, intimidades, miedos, anhelos y comprobarán que todo es posible, independientemente de la edad, de los obstáculos, de las barreras.
“Vivir con miedo es vivir a medias; tomar el camino seguro es no llegar jamás. Decir que no a los deseos es como decir que sí a la muerte. Uno nunca se arrepiente de las cosas que ha hecho, se arrepiente de las que no hizo”.
La novela está narrada unas veces por Mamoune y otras por Jade, permitiéndonos así la autora conocer en profundidad sus pensamientos más recónditos, la evolución de esa maravillosa complicidad entre abuela-nieta que va progresando día a día.
¿Qué me ha parecido? ¿Me ha gustado?
Pues creo que ya está casi todo dicho. He disfrutado enormemente con esta lectura tan bien escrita y no he podido evitar quedarme con algunas de sus párrafos deliciosos, con frases que te llegan, que te hacen reflexionar sobre la vida, la muerte, la vejez, la enfermedad.
“Según Mamoune, con el tiempo uno no perdía la juventud, sino que lo que cambiaba era una determinada manera de pensar en la edad-En el interior de un cuerpo mayor, el fuego que nos consume nunca se apaga del todo. Y eso es lo más injusto de la forma en que se piensa en la gente de edad. Uno se indigna con ese cuerpo, que ya no sigue los movimientos impetuosos del deseo. Al fin y a cabo, lo único que nos mueve de un lado para otro es seguir los caminos de las aspiraciones, querida mía. ¡No morir y vivir mejor, valiente enigma! No es el cuerpo quien decide, sino otra cosa. Y cuando el alma se niega el placer de desear, a pesar de la edad, entonces todo se derrumba. Así que desde que vivo contigo, ya no tengo que hacer ningún esfuerzo para olvidar que soy una anciana. ¡Al contrario! He llegado a la conclusión de que he rejuvenecido.”
Tan sólo un pequeño “pero”: la traducción del libro deja mucho que desear, te encuentras con unas cuantas erratas que chirrían. Es una pena porque considero que con un argumento tan valioso entre las manos, la editorial podría haberse esforzado un poco más.
El final me ha parecido genial, en un epílogo sorprendente que me ha dejado con la boca abierta porque no te lo esperas en absoluto. Sólo puedo anticiparos sin incurrir en spoilers, que nada es lo que parece y que hasta la última página no conocerás la verdadera historia de Jade y Momoune.
Podría gustarme, me lo apunto :D
ResponderEliminarSeguro que sí, Tamara. Por cierto ¡Bienvenida al blog!!!
EliminarUn beso
Hola, me ha gustado mucho lo que cuentas, me la llevo anotada!!!
ResponderEliminarBesos!
Me alegra Raquel y ya sabes, si en algún momento te apetece leerla, me la puedes pedir y yo te la envío con mucho gusto
EliminarBesos
Lo tengo pero olvidado. No me daba cuenta de que estaba tan bien escrito- eso veo por los fragmentos que citas. ¿De verdad chirría la traducción? Bueno, me aguantaré... Creo
ResponderEliminarSaludos
Bueno, hay unas cuantas erratas que al leerlas sí te chirrían un poco, te llaman la atención. La hemos leído a la vez una compañera de trabajo y yo y a las dos nos ha pasado lo mismo, lo hemos comentado en varias ocasiones
EliminarNo conocía este libro. Y me parece que me gustaría mucho. Me lo llevo bien apuntado.
ResponderEliminarBesotes!!!
Seguro que te encantaría Margari. Es una novela muy tierna, repleta de sabias palabras y frases, de esas que en un futuro te gustaría recordar
EliminarBesos
No me importaría leerla, la verdad es que he visto pocas reseñas.
ResponderEliminarBesos.
Pues anímate, Azalea, es un libro genial, lleno de sensibilidad y frases increíbles
EliminarBesos
Brindo por nuestra amistad y quiero que sepas que estoy muy feliz de tenerte entre mis amigos bloggeros.
ResponderEliminarMuchas gracias por un año más a mi lado.
Felices fiestas!
Hola Tamara!!! Muchas gracias. Yo también te deseo que pases unas muy felices fiestas.
EliminarBesos navideños
Hola.
ResponderEliminarUn nuevo año se nos viene encima y no sabemos cómo nos irá durante su vigencia.
Lo que sí sabemos es cómo nos ha ido en este y, particularmente, os quiero agradecer estar a mi lado durante este mal año.
Sin vosotros lo hubiera pasado peor y vuestros comentarios han sido uno de los pilares que me han sujetado para no caer.
Por eso y por muchas cosas más, zas, regalito que te llevas.
http://subefotos.com/ver/?1f1db8ac532eedc15f4bca32c43a9de2o.jpg
Un abrazo y Felices Fiestas.
Marian:
ResponderEliminarBuena Nochebuena!!!!!
Buena Navidad!!!!
En estas palabras te dejo mi regalo:
Deseando sientas que :
La felicidad no está en encontrar a quien te haga feliz, sino en aprender a traer felicidad a los que te rodean.
Que la felicidad la encuentran las personas que aprenden a vivir sabiamente.
Que establezcas relaciones saludables, pongas límites, aceptes lo bueno y rechaces lo cuestionable.
Que tus pensamientos viajan en los sueños y que sean coloridos
Que aunque estés solo, te sientas siempre acompañado.
Que mires en cada atardecer, la promesa de un mañana.
.Y..... queridos Amigos y Amigas...no dejen de soñar!!!!!!.
Los sueños son algo nuestro que nadie nos puede quitar!!!!!!
Martha
Te deseo que en este año 2015:
ResponderEliminar...... "se transformen tus ilusiones y deseos en realidades, sin que se apague la llama de la esperanza;
que te animes a volar alto como el águila, a sostenerte como un árbol y a iluminarte como una estrella "......
A ti y seres queridos mi mas apreciado recuerdo, con las energías mas positivas que existan de bonanza.
Cariños
Martha