Un título así no podía dejarme indiferente.
Desde el principio sospeché que podía encerrar un tema cuanto menos curioso y no me equivoqué.
Ante todo es un libro positivo, muy positivo, que te deja buen sabor de boca y una sensación de profundo optimismo.
Es el primer libro de este autor canadiense que en la cubierta nos explica: "opté decididamente por un tono alegre y optimista, para hacer de mi novela un soplo de esperanza y amor"
Y además de conseguirlo, nos transmite algo importante para afrontar la vida como nos viene: cualquier suceso que a priori nos puede parecer nefasto, es posible que con el tiempo comprobemos que ha sido el precedente de algo maravilloso.
Y así es como una gran tormenta de hielo cambia por completo las vidas de todos los protagonistas de esta historia.
Es navidad, Quebec, año 1998, todo comienza cuando al niño de once años sin nombre, (digo "sin nombre", porque en verdad no se le nombra en todo el libro), sus padres le anuncian que se van a separar. Todo su mundo parece desmoronarse y le pide ayuda al cielo.
Es el primer libro de este autor canadiense que en la cubierta nos explica: "opté decididamente por un tono alegre y optimista, para hacer de mi novela un soplo de esperanza y amor"
Y además de conseguirlo, nos transmite algo importante para afrontar la vida como nos viene: cualquier suceso que a priori nos puede parecer nefasto, es posible que con el tiempo comprobemos que ha sido el precedente de algo maravilloso.
Y así es como una gran tormenta de hielo cambia por completo las vidas de todos los protagonistas de esta historia.
Es navidad, Quebec, año 1998, todo comienza cuando al niño de once años sin nombre, (digo "sin nombre", porque en verdad no se le nombra en todo el libro), sus padres le anuncian que se van a separar. Todo su mundo parece desmoronarse y le pide ayuda al cielo.
A partir de entonces, comienza a llover hielo y todo se complica para ellos.
Los otros personajes son:
-- Julie, la maciza del vecindario, de profesión prostituta
Los otros personajes son:
-- Julie, la maciza del vecindario, de profesión prostituta
-- Boris y sus peces
-- Simon y Michel, una pareja de homosexuales, cuya mayor aspiración es dejar de esconderse y gritarle al mundo que se aman
-- Simon y Michel, una pareja de homosexuales, cuya mayor aspiración es dejar de esconderse y gritarle al mundo que se aman
-- Alexis, un hombre resentido, que odia a la humanidad y para él todo son "maricones y judíos de mierda" y su hijo Alex, que crece pensando que no tiene madre.
Durante los días que dura la gran tormenta, la mitad del vecindario se queda sin electricidad, y los vecinos que hasta entonces no habían intercambiado más de dos palabras seguidas, se ayudan, se conocen, se apoyan.
Julie le ofrece su casa a Boris, un científico ruso que nunca antes se había enamorado, porque "lo único que le interesaba desde siempre era su propia persona y sus peces" y que hace un estudio para su tesis: "un pez en un acuario siempre sigue el mismo recorrido, así mismo, debe modificar su camino ritual cuando llega un nuevo inquilino. Tu no escoges tu camino, los demás lo hacen por ti" Para ello es vital que la temperatura de el agua no descienda de los 32 grados, si ello llegase a suceder, algunos peces podrían modificar su camino y echar por tierra toda la teoría defendida en su tesis.
Simon y Michel cobijan a Alex y Alexis en su casa y además comparten con ellos su secreto más íntimo. Por fin se sienten libres...
Durante los días que dura la gran tormenta, la mitad del vecindario se queda sin electricidad, y los vecinos que hasta entonces no habían intercambiado más de dos palabras seguidas, se ayudan, se conocen, se apoyan.
Julie le ofrece su casa a Boris, un científico ruso que nunca antes se había enamorado, porque "lo único que le interesaba desde siempre era su propia persona y sus peces" y que hace un estudio para su tesis: "un pez en un acuario siempre sigue el mismo recorrido, así mismo, debe modificar su camino ritual cuando llega un nuevo inquilino. Tu no escoges tu camino, los demás lo hacen por ti" Para ello es vital que la temperatura de el agua no descienda de los 32 grados, si ello llegase a suceder, algunos peces podrían modificar su camino y echar por tierra toda la teoría defendida en su tesis.
Simon y Michel cobijan a Alex y Alexis en su casa y además comparten con ellos su secreto más íntimo. Por fin se sienten libres...